El héroe de los de abajo
"Nadie nace odiando a otra persona por el color de su piel, o su origen, o su religión. La gente tiene que aprender a odiar, y si ellos pueden aprender a odiar, también se les puede enseñar a amar, el amor llega más naturalmente al corazón humano que su contrario." (Mandela: 1994).
Mi propósito es explicar las causas y efectos
de la discriminación étnica y para ello voy a citar a un notable escritor
Peruano.
Considero al admirable antropólogo José María Arguedas como Héroe por su dedicación y amor hacia los
indígenas, quien vivió y relató crudamente la realidad del choque entre dos
mundos, donde nuestro héroe tiene un magno amor por “los de abajo” quienes en
este contexto vienen a ser los discriminados y explotados indígenas (por eso
los llamó “los de abajo”, por la mala consideración estereotipada y social que
se le tiene). Claramente al introducirnos en la Literatura Arguediana, nos
damos cuenta de lo valiosos que son estas personas, iguales a nosotros,
peruanos que sufrieron durante muchos años y que hoy todos debemos tratarnos
como hermanos.
José María Arguedas relata en sus diversas obras el amor y respeto hacia
el pueblo indígena y la cultura de los quechua hablantes. En nuestra sociedad,
la discriminación es un mal social, pues daña las relaciones interpersonales
y la convivencia, las
que en la actualidad, va
disminuyendo; pero, ¿qué pasaría si nos remontamos
al siglo XX, exactamente en el año 1920?, la cosa cambia ¿verdad?
Nuestro Perú es un país pluricultural y multilingüe, donde los indígenas con cultura e idioma diferentes a la clase alta sufrían de exclusión. Cuando José María Arguedas apenas tenía 2 años, al quedar huérfano de madre, su padre se vuelve a casar. Pasado el tiempo la madrastra lo enviaba con los campesinos y empleados, desde ese entonces, Arguedas vivió el choque de dos mundos, que años después reflejaría en sus obras, mediante la Literatura Arguediana, la que ha sido el soporte para eliminar la discriminación en Perú.
Nuestro Perú es un país pluricultural y multilingüe, donde los indígenas con cultura e idioma diferentes a la clase alta sufrían de exclusión. Cuando José María Arguedas apenas tenía 2 años, al quedar huérfano de madre, su padre se vuelve a casar. Pasado el tiempo la madrastra lo enviaba con los campesinos y empleados, desde ese entonces, Arguedas vivió el choque de dos mundos, que años después reflejaría en sus obras, mediante la Literatura Arguediana, la que ha sido el soporte para eliminar la discriminación en Perú.
"La literatura indigenista no puede darnos una versión
rigurosamente versista del indio. Tiene que idealizarlo y estilizarlo, tampoco puede darnos su
propia ánima. Es todavía una literatura de mestizos. Por ello se llama
indigenista y no indígena”. “Una literatura indígena, si debe venir y vendrá a su
tiempo. Cuando los propios indios estén en grado de producirla". (Escajadillo: 1993)
Todos nosotros hemos leído o al menos hemos escuchado acerca de este
grandioso autor; pero en verdad nos hemos puesto a pensar lo siguiente: ¿La literatura
arguediana, ayudó a
disminuir la discriminación en nuestro Perú? En pocas
palabras, la literatura
arguediana fue impuesta por José María
Arguedas, a través de sus obras, dándole el valor y el respeto que no se les
dio a los indígenas en su época.
Arguedas
escribe con un afán de justicia
para dar a conocer los maltratos de los indios peruanos, a lo largo de su vida, sus experiencias lo
llevan a escribir diferentes obras, novelas y cuentos, en los que resalta a los quechua hablantes.
Arguedas
relata las diferentes formas de discriminación hacia el poblador indígena, inspirándose
en sus propias vivencias; por ello es de gran importancia conocer el pensamiento y literatura que impuso este autor;
además de conocer las razones de ¿cómo esto ayudó a que los lectores y peruanos tomemos conciencia en contra
de la discriminación?
La discriminación étnica a Perú fue introducida por
los españoles y los criollos o nacidos acá, quienes convertidos en dueños de
tierras y personas fueron a la vez autoridades.
En nuestro Cutervo, celebramos una elegante costumbre:
la corrida de toros; un importante relato cuenta como el Subprefecto de Puquio (Ayacucho), prohíbe que la fiesta se
dé a base de las costumbres indígenas, en las que los pobladores eran quienes
toreaban para el deleite del pueblo, este dio el mandato para que se traiga un
torero desde España; asimismo, dio la orden de que si un indio va a la arena o interviene, sea disparado. Cuando el torero empezó la faena,
fue abucheado por el pueblo; del mismo modo, entraron indígenas al ruedo para dar el espectáculo que la gente
fue a ver, ellos fueron aclamados y venerados por el público, del mismo modo,
el subprefecto y autoridades no se opusieron a la muchedumbre, y así, la tradición
continuó. Si nos remontamos al siglo pasado, en nuestra provincia, las cosas no
eran muy diferentes, específicamente hasta 1969, el día 24 de Junio
asistían a la corrida solo campesinos y del 25 al 30 de Junio, los habitantes
de la ciudad exhibiendo un traje distinto y especial para cada día.
Todos tenemos momentos difíciles, de hecho hubo un
tiempo donde Arguedas estuvo en prisión, como personaje de la obra el sexto, donde nos relata la historia de Gabriel quien es testigo de muertes, violaciones,
conflictos entre apristas y comunistas. Allí se encuentra lo mejor y peor de la
cárcel de Perú, ocurrieron muchos incidentes, uno de ellos hablaba sobre un
joven de 14 años, que fue apresado porque su patrona lo acusó de robo quien es violado y apuñalado; luego
“el piurano” ayudó a este muchacho; pero un teniente al que llamaban “Pato” lo
insultó, por esto, el piurano lo asesinó. La violencia es protagonista en los
conflictos carcelarios dándonos una visión sobre la realidad peruana en esas
épocas.
Durante cada periodo, la vida es distinta; Arguedas representó la realidad social del
Perú de su época, él se
identifica con Rendon Wilka, personaje que al ir al colegio en Lima sufre
discriminación, un recuerdo imborrable, después de lo sucedido, va a su tierra
natal, pasado años, regresa con una idea fija: “Luchar por los oprimidos” fue
total la entrega de este, que terminó con su muerte. Rendon Wilka elige
valientemente su final: "Si quieres, si te provoca, dame la muertecita, la
pequeña muerte, capitán”. Sacudido por las balas, cae vomitando sangre, exactamente igual que en
un atardecer de diciembre de 1969, en un sitio menos problemático y más tranquilo, una sencilla aula
de la Universidad agraria de la Molina, cuando ya había salido el último alumno: Arguedas dio cumplimiento a
una idea que desde joven le perseguía, su propia muerte, y con un revólver de
pequeño calibre se levantó la tapa de los sesos. Con eso terminaba Arguedas de
encarnar la figura del personaje que eligió para esta novela, la de Rendón
Willka, que, como indio, tuvo una dolorosa y lenta agonía.
Algo que nos hace admirar y recordar a este autor, es
su vivencia entre dos ambientes, absolutamente distinto uno del otro, el choque de dos mundos. Un ejemplo de esto
es la historia de Ernesto, en los ríos profundos, un niño que en su infancia por ausencia de su padre,
pasa el mayor tiempo en el internado junto a los discriminados indios, tenemos dos tipos de Ernestos, (el del pasado *niño* y
presente *adulto*), los cuales van narrando sus vivencias y dando a entender,
lo que vivió el autor, cuando era un niño. Arguedas presenta la violencia de
los blancos como una brutal realidad que afecta a los pueblos indígenas.
La concepción del indigenismo en Arguedas proviene de la convivencia con los indígenas, los que lo educaron con sus tradiciones, llegándole a enseñar incluso el quechua; gracias a él y a sus famosas obras es que el Perú, actualmente, ha dado mayor valor a los indígenas, a nuestras diversas culturas; debido a que en todas sus obras, particularmente en Todas las sangres, relata temas de conflictos, violencia y maltrato hacía los de la baja clase e indígenas; pues él vivió en este mundo y tal fue su empatía que al compartirlo con miles de personas, de diferentes lugares del Perú y el mundo, conmovió nuestros corazones. Como dice el periodista Arturo Villar Zudek (2016) quien no conoce su historia, está condenado a repetirla.
Arguedas
relató problemas que en ese entonces hacían de Perú un país con poco valor
cultural, pasando los años sus novelas, cuentos y relatos, fueron ganando fama
y popularidad; además, debido al contenido de
ellos, la literatura Arguediana adquirió un valor único que es enseñado en
diferentes lugares, escuelas, hogares; del mismo modo las generaciones después
de 1920, adquirieron mayor conciencia, sobre la igualdad de razas, pensamiento,
religión, sexo o cualquier otra índole, para respetar lo que es nuestro y a
quienes son parte de nuestra historia. Arguedas consideró al quechua o runa simi (lengua del hombre), como su lengua materna, fue traductor de
este idioma y además difundió el indigenismo, sin duda todo un personaje histórico, que con
sus obras, contribuyó a un Perú mejor.
En concordancia don la Declaración Universal de los
Derechos Humanos y el Artículo 2° de la Constitución Política del Perú que
trata sobre los derechos fundamentales de la persona, confirmo, que José María Arguedas Altamirano es el
Héroe de los de abajo y debemos seguir su ejemplo, luchando contra todo tipo de
discriminación social, hacerlo en los diferentes niveles y modalidades de
educación peruana por medio de la radio, televisión, prensa y redes sociales.
Ensayo presentado en el Concurso Nacional "JMA"
Escrito por Armando Arturo Custodio Díaz
Asesor: Arturo Guevara Neyra
Toribio Casanova
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